LOS DESENFOCADOS
Panoramia es un lugar no común. Vivimos en la red, una red de lugares, momentos, personas e ideas que se unen para concluir en una revista digital construida con la idea de experimentar, equivocarnos, equivocarnos, equivocarnos… aprender, reaprender y llegar a lo que llaman “innovar”.
Somos una puesta en escena de imagen, sonido y letras, una visión panorámica del entorno. Somos los ojos del niño que mira con asombro, los del joven apasionado, el adulto inseguro y el anciano sabio. Al final, somos algo que se puede armar y desarmar.
Usted sabe que le gustamos, tanto que podría llegar a un orgasmo. Lo que ha leído no lo encontrará en ninguna parte y si lo encuentra… lo importante es la salud, así que no lo piense tanto y dónenos su dinero. En definitiva, Panoramia es donde convergen las mentes fugaces.
DIRECTORA.
DIRECTORA. Duermo 22 horas diarias y las otras dos, sueño despierta. Amo el viento, la lluvia y la niebla. Me gustan los lugares tranquilos y libres. Tengo la suerte de haber nacido con una mente infinita como el cielo, para poder llenar mi mundo de sueños.
DIRECTORA. Nací el 14 de abril de 1997 en la ciudad de Armenia. Soy una cinéfila amante de la actuación. Me gusta leer ficción pero intento escribir sobre la realidad. Algunas historias reales pueden ser más interesantes.
Nací el 27 de marzo de 1997, en Armenia, Quindío. Curso en loución, amante del fútbol y de los animales. Defiendo el arte urbano y la cultura Hip Hop.
Intento de periodista, adicto al anime y a viajar. Intento no describirme mucho, porque creo que eso sería limitarme.
Nació un 21 de agosto de 1995 en la ciudad de Armenia, Quindío. Es amable y muy conversador. Acelerado para hablar y para realizar algunas actividades. Apasionado con las cosas y las personas que realmente quiere. Le gusta mucho las artes, el periodismo y todo lo relacionado con la parte humana. Lo que más aprecia en las personas es la sencillez.
Tengo 20 años; la mayor parte de ellos reconociendo historias detrás de pequeños detalles, porque ser introvertida sólo me ha dado una virtud: la observación. Me quedo con el cine, las letras y las melodías que acompañan, porque ese placer suele no irse, como todo lo demás.
